¿Quieres cannabis orgánico? Los operadores recurren a esta tecnología para ahorrar millones y obtener la certificación

Cómo funciona la tecnología de radiofrecuencia

La tecnología de radiofrecuencia (RF) de Ziel ofrece una solución no ionizante a la contaminación microbiana del cannabis, que puede causar graves riesgos para la salud de los consumidores y dar lugar a costosos cierres regulatorios para los operadores.

 De Cordova explicó cómo funciona la tecnología de RF a nivel molecular: "La tecnología de RF funciona bajo la premisa de que las moléculas de agua tienen polaridad positiva y negativa. Al alinear estas moléculas de agua con un campo electromagnético, creamos fricción, que genera energía térmica".

La clave de la solución de Ziel es el calentamiento volumétrico. flor de cannabis Se coloca dentro de la máquina de RF y todo el producto se calienta de manera uniforme de borde a borde, a diferencia de los métodos convencionales en los que el calor se aplica desde el exterior, lo que a menudo da como resultado un calentamiento desigual. De Cordova ilustró la diferencia.

"Si piensas en cocinar un pavo en el horno, el exterior se cocina demasiado mientras que el interior puede quedar poco cocido. Pero con la tecnología RF, logramos la temperatura de muerte objetivo de 80 °C en toda la flor sin quemar el exterior. Este calentamiento uniforme es crucial porque si alguna parte de la flor no alcanza los 80 °C, la Los contaminantes microbianos no se erradicarán por completo", explicó.

No ionizante vs. ionizante: la ventaja orgánica

Este método de calentamiento volumétrico es lo que diferencia a la radiofrecuencia de las técnicas tradicionales como los rayos X. Tanto los métodos de rayos gamma como los de rayos E funcionan alterando la estructura molecular del cannabis, lo que puede degradar los cannabinoides y terpenos que son esenciales para la potencia, el sabor y el aroma del producto.

"La RF preserva las cualidades sensoriales del cannabis", dijo de Cordova, "porque calienta la flor de manera uniforme sin dañar la integridad de sus cannabinoides o terpenos".

Además, explicó que la tecnología de radiofrecuencia opera en el lado no ionizante del espectro electromagnético, lo que la convierte en una solución compatible con productos orgánicos. Por el contrario, las tecnologías ionizantes, como la radiación gamma y los rayos X, alteran la estructura molecular de la materia, lo que descalifica esos métodos para su uso en productos orgánicos.

Tecnología sostenible y escalable

Además, la tecnología RF utiliza solo electricidad, por lo que no requiere productos químicos, gases ni sistemas de ventilación nocivos, lo que aumenta aún más su atractivo para los operadores que buscan sostenible y eficiente "Nuestras máquinas son compactas y escalables (requieren solo una alimentación monofásica de 240 V), lo que las hace accesibles para operadores de todos los tamaños", señaló De Cordova.

De Cordova destacó la eficiencia de la máquina: "En aproximadamente 15 minutos, la máquina procesa hasta cinco libras de flor de cannabis".

Cómo la tecnología de Ziel respalda la certificación orgánica

Para los operadores que buscan la certificación orgánica, la tecnología RF de Ziel ofrece una clara ventaja. "Nuestra tecnología no es ionizante, lo que significa que califica como orgánica", dijo de Cordova. Por el contrario, los métodos ionizantes como los rayos gamma y X no cumplen con los estándares orgánicos.

Esto es especialmente importante para los mercados donde el cumplimiento orgánico del USDA es un diferenciador clave para los productos de cannabis.

Ventaja competitiva: eficiencia y ahorro de costes

Las máquinas RF de Ziel ofrecen ahorros significativos en comparación con la competencia. “En 24 horas, nuestra máquina puede procesar 480 libras de cannabis, mientras que máquinas similares que utilizan otras tecnologías solo pueden procesar 90 libras”, explicó de Cordova.

Esta eficiencia, combinada con la capacidad de la tecnología para evitar fallas de productos, ayuda a los operadores a recuperar costos rápidamente. "Con una tasa de fallas de 10%, un operador podría recuperar esa cantidad en tan solo unos meses al rescatar un producto que de otro modo se perdería".

Las máquinas de Ziel también están certificadas para su uso en Europa, con su primera instalación en Portugal. "Nos asociamos con una instalación GMP aquí en Portugal y pasamos por el riguroso proceso de certificación de la máquina para su uso en el mercado europeo", dijo de Cordova. Este proceso de certificación es fundamental, especialmente para exportar cannabis a mercados estrictos como Alemania, donde el cumplimiento de las normas GMP es obligatorio.